¿Qué es esto?

A veces la realidad y la ficción pueden confundirse, mezclarse, potenciarse. Lo que ves es más reflejo de tus ojos que de mis ideas; espero puedas vivir cada una de estas letras como yo las viví al escribirlas: suaves, complejas, caprichosas, libres e intensas.

Y si aún no sabes a qué me refiero, sí, este es un blog y aquí podrás encontrar desde párrafos crudos y apresurados hasta textos llenos de lentitud, de años y daños. No puedo prometer una temática como la vida no puede asegurarnos un único camino. Voy por donde me lleven mis pensamientos, mi amor, mi bilis y el vino.

Tampoco te diré qué sentir cuando me leas porque ni siquiera yo estoy muy segura de saber qué es lo que siento todo el tiempo. Es una de las razones por las que escribo.

¿Por qué “Ni tan buena”?

No, no soy la clásica chica mala de película que va llenarte de historias rojas y colillas de cigarro. No, tampoco vengo a juzgarte (no mucho) y a tirarte agua bendita. Solo creo que todos tenemos un poco de bien y de mal dentro de nosotros y que cada minuto tomamos la decisión que mejor nos parezca (o la que peor nos parece pero es más divertida) para enfrentarnos al mundo. Y pues todas estas reflexiones son un poco el preámbulo, las pausas activas y los resultados de pequeños momentos míos, de él, de ella, del mundo.

Si has llegado hasta aquí probablemente sea porque eres capaz de tolerar mis publicaciones (me encantaría saber por qué) y eso merece todo mi respeto y, siendo honesta, un poco de mi temor. Por ello te agradezco y te invito a mí, un poquito adentro, un poquito afuera, un poquito en ningún lugar.